Una serie de extrañas partículas subatómicas que parecen surgir de los hielos de la Antártida han dejado con la boca abierta a los físicos que las han descubierto . A primera vista, parecen similares a las que bombardean la Tierra continuamente en forma de rayos cósmicos . Aunque con una gran diferencia: los rayos cósmicos proceden del espacio y caen sobre nosotros «desde arriba». Pero nunca hasta ahora se habían detectado viniendo «desde abajo», es decir, surgiendo del propio planeta. Alejandro